MADRID (EUROPA PRESS).- Las autoridades sanitarias de Suecia anunciaron este miércoles la suspensión del uso de la vacuna de Moderna contra el coronavirus para menores de 30 años debido a los posibles efectos secundarios.
El Ministerio de Sanidad citó así un posible riesgo de patologías que incluyen una inflamación del corazón, como miocarditis y pericarditis, tal y como recoge un comunicado del gobierno.
«Estamos supervisando la situación y estamos actuando rápidamente para garantizar que la vacunación contra la COVID-19 es lo más segura posible, mientras tratamos de dar la protección adecuada», aseveró Anders Tegnell, epidemiólogo jefe.
En vez de usar las dosis de Moderna para la población más joven, el gobierno recomendó la vacuna de Pfizer para ese grupo de edad, según informaciones del diario ‘Aftonbladet’.
«La gente que se ha vacunado recientemente, con una o dos dosis, no tienen que preocuparse porque el riesgo es muy bajo», ha aseverado Tegnell, que ha afirmado que «es bueno conocer los síntomas para estar alerta».
La semana pasada, las autoridades de Eslovenia dejaron de administrar de forma temporal la vacuna de Johnson