Con corte al 23 de julio, la Secretaría de Salud (Ssa) tiene registrados 60 casos confirmados de viruela símica en todo el país, de los cuales el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) ha confirmado 59, distribuidos en 11 entidades federativas.
La Ciudad de México es la entidad con mayor número de casos (35), seguida de Jalisco (12), Estado de México 2, Nuevo León 2, Veracruz 2, Baja California (1), Colima (1), Oaxaca (1), Quintana Roo (1), Sinaloa (1), Tabasco (1). Asimismo, un caso que se confirmó en Estados Unidos, con antecedentes de estancia en Jalisco.
Este lunes el gobierno de México publicó un segundo Aviso Epidemiológico, y activó el portal de internet sobre viruela símica en viruela.salud.gob.mx que contiene información sobre síntomas, medidas preventivas, qué hacer en caso de que una persona esté contagiada y ligas de interés.
En el documento se precisa que el periodo de incubación de la viruela símica es de cinco a 21 días; la enfermedad sintomática cursa en dos fases clínicas que generalmente se autolimitan de dos a cuatro semanas.
SÍNTOMAS
En los primeros cinco días los síntomas son fiebre, dolor de cabeza intenso, ganglios inflamados, dolor de la espalda baja y musculares, falta de ganas de moverse o hacer alguna actividad física.
Entre los días uno y tres, después del inicio de la fiebre, aparece sarpullido que, por lo general, afecta primero la cara y posteriormente se extiende al resto del cuerpo. El sarpullido evoluciona asincrónicamente a erupciones en la piel, vesículas, abultamientos en forma de bolsa pequeña que contiene pus y costras. Se ha observado que las lesiones pueden aparecer a nivel genital, perianal y perioral.
TRATAMIENTO
De acuerdo con la Secretaría de Salud, hasta el momento no existe tratamiento específico y la vacuna para la enfermedad no está disponible ampliamente.
Por ello, toda persona que cumpla la definición operacional de caso probable o de contacto para viruela símica y, por lo tanto, esté sujeta a vigilancia sanitaria, debe evitar realizar cualquier viaje, nacional e internacional, hasta que se determine que ya no constituye un riesgo para la salud pública.
RECOMENDACIONES
Para prevenir la enfermedad se recomienda lavarse las manos de forma frecuente con agua y jabón o solución de alcohol gel, cubrir nariz y boca al estornudar o toser con etiqueta respiratoria; evitar compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos.
Al estar físicamente cerca de una persona enferma, usar mascarilla médica, especialmente si la o el paciente tose o tiene lesiones en la boca. Lavar ropa, toallas, utensilios para comer y sábanas en contacto con la persona enferma, utilizando agua tibia y detergente. Limpiar y desinfectar espacios en los que haya estado la persona enferma.
Además, evitar contacto con las lesiones; si se deben tocar, utilizar guantes y desechar de forma correcta. En caso de síntomas, acudir a solicitar atención médica y evitar contacto con otras personas.