WASHINGTON (apro) – El gobierno de Estados Unidos a través del Departamento de Estado, anunció la imposición unilateral de restricción de visado a 116 nicaragüenses que apoyan o forman parte del gobierno del presidente de ese país, Daniel Ortega.
Antony Blinken, el secretario de Estado del gobierno de Joe Biden, explicó por medio de un comunicado de prensa que las restricciones son parte de las acciones de la comunidad internacional para deplorar los abusos a los derechos humanos y socavación democrática en Nicaragua.
“El Departamento de Estado está tomando pasos para imponer restricción de visa a 116 individuos cómplices en minar la democracia en Nicaragua, entre los sancionados hay alcaldes, fiscales, administradores universitarios, policías, celadores de cárceles y militares”, informó Blinken.»
Tanto Biden como su secretario de Estado insisten en condenar las “acciones antidemocráticas” del gobierno de Ortega y su esposa, Rosario Murillo, a quienes responsabilizan de todo tipo de abusos a los derechos humanos que durante sus mandatos se han llevado a cabo en Nicaragua.
Por su parte, el Departamento del Tesoro estadunidense, aplicó también sanciones financieras a seis funcionarios del gobierno Ortega-Murillo, para confiscarles bienes y congelarles las cuentas bancarias que tengan en territorios bajo la jurisdicción de los Estados Unidos.
“Instrumentamos estas sanciones económicas y restricciones de visa para promover la rendición de cuentas del régimen Ortega-Murillo, que va en escalada con su autoritarismo y abusos”, subrayó Blinken.
El secretario de Estado de la presidencia de Biden, ahondó en establecer que el gobierno nicaragüense mantiene encerrados y padeciendo de falta de atención médica y humana adecuada, a 170 prisioneros políticos, mientras otros permanecen en un aislamiento total e ilegal.
“Los corruptos sistemas judicial y de seguridad de Ortega arrestaron a estos individuos por practicar el periodismo independiente, por trabajar en organismos de la sociedad civil, buscar la realización de elecciones competentes y expresar públicamente su opinión y expresión contraria a la ortodoxia gubernamental”, matizó el Secretario de Estado.
Respecto a la nueva toma de posesión de Ortega como presidente de Nicaragua, Blinken anotó que eso es el resultado de la manipulación de las elecciones realizadas el 7 de noviembre de 2021, lo que fue en contra de un proceso electoral libre y justo que merecen los nicaragüenses.