La presidenta de Perú, Dina Boluarte, dijo este miércoles que se podrían adelantar las elecciones generales para fines del 2023 en medio de protestas que exigen comicios inmediatos, mientras la justicia evalúa extender por 18 meses la prisión para el destituido exmandatario Pedro Castillo, investigado por rebelión.
En las protestas, algunas muy violentas principalmente en el interior del país, los manifestantes piden además el cierre del Congreso, una asamblea constituyente y la renuncia de Boluarte.
La mandataria afirmó que se podría acortar aún más los plazos para las elecciones, después de coordinar acciones con los representantes del jurado electoral y del congreso.
«Los tiempos calzarían para abril del 2024, sin embargo, haciendo reajustes ayer (miércoles), conversando esto se puede adelantar a diciembre del 2023, porque antes de esa fecha (…)legalmente no calzaría», manifestó a periodistas Boluarte, quien debería completar el actual mandato gubernamental que vence en julio del 2026, según la Constitución.