By En 2021, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), ya alertaba sobre las condiciones en las que se encontraba el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) 3, de Ciudad Juárez, Chihuahua.
En el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria, elaborado por el organismo, reveló que ese penal presentaba problemas de sobrepoblación, hacinamiento, insuficiencia de personal de seguridad y custodia, así como carencia de programas para la prevención de adicciones y desintoxicación voluntaria.
También reveló que ese penal presenta deficientes condiciones materiales y de higiene en sus instalaciones para alojar a las personas privadas de la libertad.
En el diagnóstico, la CNDH evaluó con calificaciones de cinco o incluso menor a ésta, los Centros de Rehabilitación Social de trece estados de la República.
Se trata de Ceresos que se encuentran en Baja California, Sonora, Puebla, Hidalgo, Chiapas, Chihuahua, Tabasco, Sinaloa, Guerrero, Oaxaca, Tamaulipas, Zacatecas, Nayarit y Campeche. Las cárceles que fueron calificadas con 4.21 se encuentran en Tabasco.
