En el marco de la tragedia de San Antonio, Texas, donde murieron 53 migrantes por asfixia y calor, la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos puso fin a la medida anti migratoria que impuso el ex presidente Donald Trump; llamada “Quédate en México”.
En una votación que terminó 5 a 4, la mayoría de los magistrados de la Suprema Corte se colocó del lado de la estrategia del actual presidente, el demócrata Joe Biden, de eliminar todas las acciones anti migratorias y anti constitucionales de la era trumpiana en Estados Unidos.
Con este fallo los migrantes centroamericanos que logran presentar sus peticiones de asilo en las garitas migratorias del sur de los Estados Unidos, no serán obligados a esperar en México la resolución a su pedido, sino que ahora podrán hacerlo en territorio estadunidense.
La decisión de la Suprema Corte tomó por sorpresa incluso al propio gobierno de Biden, tomando en cuenta que la mayoría de los nueve magistrados son conservadores y durante el mandato de Trump apoyaron sus acciones en referencia a la inmigración.
Los jueces conservadores que votaron en contra de los protocolos de Trump fueron el presidente de la Corte John Roberts, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett, con lo que ahora los centroamericanos podrán quedarse en Estados Unidos cuando pidan asilo en ese país.
Desde antes de que la Corte se posicionara, el gobierno de Biden ya había hecho algunos cambios para los procesos de solicitudes de asilo con el objetivo de agilizar las resoluciones lo que en la actualidad tiene un periodo de espera de entre 6 meses hasta cinco años.
Con una orden ejecutiva instrumentada en abril de este año, Biden autorizo a agentes de inmigración a revisar las peticiones de asilo y argumentos de centroamericanos y a que fuera su prerrogativa determinar si era justificada y se podía aceptar.
Hasta antes de este orden ejecutiva de Biden eran únicamente los jueces migratorios y las cortes lo que determinaban si se podía procesar una solicitud de asilo, requerimiento que causaba más atrasos en emitir una decisión de aceptabilidad o negatividad.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Interior, tras los cambios emitidos por Biden con la orden ejecutiva, en mayo pasado se aceptaron 7 mil 200 peticiones de asilo de migrantes centroamericanos quienes ahora podrán ser aceptados a territorio estadunidense para esperar respuesta.
Desde que Trump estableció por medio de una orden ejecutiva el programa Quédate en México, unos 70 mil migrantes centroamericanos fueron rechazados para ingresar a Estados Unidos no obstante a que sus pedidos de asilo fueron admitidos.
La Casa Blanca sostiene que en 2021, por ejemplo, el gobierno estadunidense procesó unas 670 mil solicitudes de asilo de migrantes centroamericanos que llegaron a la frontera sur de Estados Unidos a través de México, aunque no a todos les aceptaron su pedido.
Quédate en México era básicamente una medida anti migratoria para desalentar a los peticionarios de asilo, porque muchos de estos migrantes centroamericanos al ser rechazados en lugar de quedarse en territorio mexicano optaban por regresar a sus naciones de origen.
De acuerdo con la constitución política y las leyes migratorias de Estados Unidos, a cualquier persona solicitante de asilo y de cualquier nacionalidad a la que se le acepte revisar su caso, debe ser aceptada a quedarse en territorio estadunidense hasta que les den una respuesta.
La acción de la Suprema Corte permite que los solicitantes de asilo centroamericanos a quienes se acepte revisar su caso pueden quedarse en Estados Unidos en un centro de atención humanitario y migratorio, o pueden vivir con familiares o amigos si los tienen que ya tengan domicilio en algún estado de la Unión Americana.