Los juicios contra la ex dirigente birmana Aung San Suu Kyi, derrocada por un golpe de Estado en febrero y acusada de varios cargos por la junta militar, comenzarán el próximo 14 de junio.
La premio Nobel de la Paz de 1991 hace frente a varios cargos que abarcan desde la posesión ilegal de walkie-talkies hasta la incitación a desórdenes públicos o la violación de una ley sobre secretos de Estado.
“Tendremos los testimonios de la parte demandante y testigos programados a partir del lunes 14 de junio”, declaró a la agencia AFP su abogada, Min Min Soe.
En otro proceso, Suu Kyi será juzgada a partir del 15 de junio junto al depuesto Presidente Win Myint por sedición.
Ambos juicios podrían finalizar en julio, indicaron sus abogados la víspera.
La acusación más grave contra Suu Kyi es violar una ley de la época colonial sobre secretos de Estado.
“Para un régimen ilegal, se trata de desacreditar a una dirigente elegida democráticamente con base en cargos falsos que pondrían en aprietos a una dictadura de pacotilla”, dijo el analista independiente David Mathieson.
Aung San Suu Kyi, que ya pasó más de 15 años en arresto domiciliario durante los precedentes regímenes, se juega mucho. Si la declaran culpable, podría ser apartada de la política y condenada a muchos años de prisión.