Un caza bielorruso interceptó ayer un avión de línea de la compañía Ryanair a bordo del cual viajaba un activista de la oposición que, según esta última, fue detenido tras su aterrizaje imprevisto en Minsk, suscitando la ira en Europa.
El medio opositor Nexta afirmó que los servicios de seguridad detuvieron a su ex redactor en jefe, Roman Protasevich, tras el aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de la capital del avión, un Boeing 737, procedente de Atenas y rumbo a Vilna, capital de Lituania, país de la Unión Europea (UE).
El aparato pudo finalmente continuar su ruta, aunque se desconocía si Protasevich estuvo a bordo.
Los mandatarios de la UE, que urgió a Minsk a permitir que todos los pasajeros pudieran continuar su viaje, abordarán el incidente y posibles sanciones durante una cumbre hoy mismo.
Varios países del bloque, como Alemania y Lituania, denunciaron los hechos que el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, calificó de “terrorismo de Estado” y para los que pidió sanciones inmediatas.
Francia convocó al embajador bielorruso en París. Y el Reino Unido, que ya no forma parte de la UE, también advirtió al presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, que se expone a “graves consecuencias”.
La OTAN pidió una investigación internacional por este “incidente grave y peligroso”, indicó su secretario general, Jens Stoltenberg.
El ministerio bielorruso de Interior confirmó en un primer momento en Telegram la detención de Protasevich… luego suprimió el mensaje.
FRASE
“Este impactante acto perpetrado por el régimen de Lukashenko puso en peligro la vida de más de 120 pasajeros, incluidos ciudadanos estadounidenses”
Antony Blinken
Secretario de Estado de EU
UN PERIODISTA OPOSITOR, EL OBJETIVO DEL RÉGIMEN
La operación militar contra un vuelo civil ordenada por el presidente bielorruso Aleksander Lukashenko se disparó con la intención de perseguir al periodista exiliado Roman Protasevich, detenido en Minsk.
La excusa para desviar la aeronave fue primero una amenaza de bomba, pero luego la nave fue revisada y no se encontró nada. Todos los pasajeros fueron enviados a otro control de seguridad.
Autoridades bielorrusas incluyeron a Protasevich en la lista de “personas involucradas en actividades terroristas”.