Pese al rechazo de los partidos de oposición y en esta ocasión también del Verde Ecologista (PVEM), aliado de Morena en la Cámara de Diputados, el gobernante Movimiento Regeneración Nacional, el Partido del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES), aprobaron en lo general la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con 304 votos a favor, 179 en contra y cuatro abstenciones, los legisladores avalaron en lo general el dictamen, al tiempo que presentaron 412 reservas.
Tras una maratónica discusión, los diputados federales seguían presentando y votando si se aceptaba alguna de las reservas expuestas por todos los grupos parlamentarios, a excepción del PES.
Sin embargo, hasta el cierre de esta edición, ninguna reserva había sido aceptada por el Pleno parlamentario, incluidas las que presentó Morena, pues sus propuestas de cambio al dictamen sólo fueron una estrategia para defender la iniciativa desde la tribuna, ya que al terminar sus intervenciones retiraban sus reservas.
El legislador por el Partido Acción Nacional (PAN) Justino Arriaga dijo que la sesión de ayer sería recordada “ignominiosamente por décadas y que dará pie para que se escriban libros de economía, de política, de Derecho, que ilustren con el ejemplo de esta reforma eléctrica lo que no se debe hacer en un país”.
“Esos libros mostrarán a ésta, nuestra patria, como el vivo ejemplo de cómo un país próspero y con enorme potencial fue destruido por el trasnochado delirio de un Presidente que nunca se enteró que ya había terminado su campaña”, expresó Arriaga.
Por parte del PVEM, la diputada Zulma Espinoza señaló, a nombre de su grupo parlamentario, que estaban de acuerdo en que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es una pieza clave para el desarrollo nacional, pero este desarrollo no debe hacerse en detrimento de las energías renovables.
El impulso de éstas, añadió la legisladora, resulta fundamental para
mitigar el cambio climático, así como para garantizar a los mexicanos de
hoy y de futuras generaciones su derecho a un medio ambiente sano y a
la salud.
Por Morena, el diputado Pablo Gómez comentó que la
única crítica que podrían hacer a la iniciativa del Presidente de la
República era que les hubiera gustado aprobarla hace más de un año.
“El Gobierno adoptó una actitud de cautela, de búsqueda de soluciones alternativas al desastre eléctrico que hemos heredado de los neoliberales y fue infructuoso. Es indispensable la reforma de la ley”, manifestó.
El dictamen avalado modifica el orden de prioridad para el despacho de las centrales eléctricas y le da prioridad a la CFE sobre las empresas privadas.