Las comisiones unidas de Justicia y Estudios Legislativos Segunda del Senado, aprobaron el dictamen para permitir que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tome el control administrativo, financiero y operativo de la Guardia Nacional.
El presidente de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda, Rafael Espino, lamentó la falta de construcción de consensos, aunque advirtió que no es ajeno “a los cuestionamientos de legalidad, pero ahora más que nunca debemos apoyar la cruzada contra la inseguridad del Ejecutivo federal”.
Durante el debate, el coordinador de los senadores del PRD, Miguel Ángel Mancera, advirtió que el dictamen que votarán este día, tiene diversas inconsistencias que lo convierten en inconstitucional.
El senador de Movimiento Ciudadano, Noé Castañón hizo un llamado a los senadores de Morena, a no destruir el esquema legal, por atender la propuesta del Ejecutivo.
“¿En dónde queda la legalidad, el Estado de Derecho y el juramento de respetar y hacer respetar a la Constitución?” cuestionó y acusó que los senadores oficialistas están violentando la Constitución al simular actos y reformas a leyes secundarias.
Y pidió “no disfrazar voluntad del ciudadano con el fracaso del gobierno en turno”.
La morenista, Lucía Meza, respondió que su bancada no busca utilizar a las instituciones y señaló que lo que se busca es una fórmula equilibrada para la participación de la Sedena en la Guardia Nacional para prevenir cualquier tipo de abuso.
En tanto, la senadora del PRI, Claudia Ruiz Massieu Salinas, lamentó que no se diera un alto nivel de debate y que las bancadas oficialistas dieran posiciones ideológicas en lugar argumentos jurídicos.
Acusó que usan al pueblo como argumento para cambiar la adscripción de la GN, pero no lo escuchan.
La senadora del PAN Indira Rosales, echó en cara a los senadores de Morena y aliados que si las policías locales no tienen recursos es porque Morena se los quitó y desapareció el Fortamun, es decir el Fondo de apoyo a entidades para seguridad pública.
En su afán de defender el dictamen, el morenista Navor Rojas, reconoció que en Durango ya está la participación del crimen organizado en las elecciones, incluso dijo en los proceso federales.
El senador panista, Damián Zepeda, consideró que lo que deberían debatir los legisladores es cómo bajar la inseguridad, “me da hasta cierto punto gusto que por fin se quitó la máscara el presidente y dijo que sí va a militarizar (…) ya se descaró”, acusó.
Incluso señaló que el presidente López Obrador está “tan obsesionado” con el expresidente Felipe Calderón, que hasta copia su fallida estrategia de seguridad pública.
El senador del PT, Joel Padilla, aseguró que la Guardia Nacional “es y seguirá siendo una corporación de carácter civil, nadie ha dicho otra cosas, en el dictamen no viene otra cosa, dado que solamente la situación operativa y administrativa serán a cargo de la Sedena”.
El también morenista, Elí Cervantes, reconoció que la Suprema Corte es la que terminará definiendo el dictamen, “porque quizá tendrá que ser una reforma constitucional”; no obstante, anunció su voto a favor de la propuesta presidencial.
De esa manera, será este jueves cuando el Pleno del Senado debata y en su caso apruebe las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, a la Ley de la Guardia Nacional, a la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos y a la Ley de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, en materia de Guardia Nacional y Seguridad Pública.
Por tratarse de leyes secundarias, Morena requiere una mayoría simple para su aprobación, la cual logra con el apoyo de sus aliados legislativos del Partido del Trabajo, Verde Ecologista y Encuentro Social; mientras que la oposición ha advertido que votará en contra de este dictamen por considerar que se militarizará al cuerpo civil que es la Guardia Nacional, además de avizorar visos de inconstitucionalidad.