By Hasta ahora 21 gobernadores se adhirieron al Instituto Nacional para el Bienestar (Insabi), seis entidades rechazaron unirse a la compra consolidada de medicinas y equipo médico, entre ellos Morelos, y en el tercer nivel de salud sólo el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía ha descartado la propuesta de implantar la gratuidad en el servicio.
Ese Instituto “tiene contrato de 622 millones de pesos, vigente hasta noviembre de 2020”, informó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell.
Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que sólo queda un director que “no quiere la gratuidad”, y lo convocó a que “recapacite, porque tienen ahí contratados 600 millones de pesos de servicios, de medicamentos. Lo llamo a que recapacite. Ojalá se adhiera. Nada por la fuerza, todo por la cooperación”.
Al presentar el reporte semanal del Pulso de la salud, López-Gatell resaltó que todos los institutos, excepto el citado, “dijeron que se van a adherir”, a pesar de que la mitad -incluidos hospitales de tercer nivel- tienen contratos con distintos proveedores y diferente vigencia, porque “no hay penalizaciones”.
Especificó que el director del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía decidió: “Yo quiero seguir con el contrato, por lo cual el diálogo sigue abierto por el bien para la salud. Si un instituto no prioriza eso, no habla bien…”.
Nosotros, apuntó, “no vamos a quedarnos atados de manos”. Insistió en que los contratos respondían al modelo anterior de subrogación.
“La lógica de mercado es que los privados lo hacen mejor y son más eficientes, lo que lleva a la fragmentación y sobreprecio». Antes, reiteró, “la estructura del sistema estaba encaminada a privilegiar intereses particulares”.
Por ello, al ser cuestionado sobre mal uso de recursos, señaló que las investigaciones no son un capricho ni se trata de “una cacería de brujas”. Todo es parte de un proceso deliberativo, en el que “vamos a ser muy cuidadosos”.
López-Gatell dio a conocer un diagnóstico de capacidades instaladas en el sector, en la cual resaltó la desigualdad que priva entre entidades, particularmente el sur, donde el gobierno “tiene una priorización”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) consideró que para 2018 se debió contar con 18 camas hospitalarias por cada 10 mil habitantes y México tenía ocho por cada diez mil.
En cuanto a personal de salud, la meta mundial era de 44 por cada diez mil habitantes, y el país tenía 27 por diez mil. El único estado que supera la referencia de la OMS es la Ciudad de México.
López-Gatell resaltó que hay 12 médicos en México por cada diez mil habitantes. Uno de los principales retos son los odontólogos, pues se tiene uno por cada diez mil habitantes; lo mismo en el caso de los sicólogos, de los que hay uno por cada diez mil, y 2.6 promotores de la salud por cada diez mil habitantes.
Destacó que una de las encomiendas del Insabi es contratar hasta 70 mil médicos, enfermeras y promotores de la salud (14 mil por año) a lo largo de un lustro.
“Estamos avanzando en el entrenamiento y reorientación de personal de la salud. Teníamos 6 mil personas que trabajaban para el régimen del Seguro Popular -operaciones administrativas-, y el
Insabi los incorpora para que sean gestores”.
En cuanto a compra de equipo, recordó que el monto aproximado de inversión es por 2 mil 499 millones 960 pesos.
Acerca de compras consolidadas, el subsecretario expuso que se adhirieron 26 estados. Los seis estados que no lo hicieron (Aguascalientes, Guanajuato, Morelos, Nuevo León, Tamaulipas y Jalisco) se harán responsables del abastecimiento.
En su conferencia de prensa, el presidente manifestó que aún quedan resistencias, pero “estamos decididos a que tiene que funcionar bien el sistema y ser eficaz, ofrecer buen servicio, de calidad y que todos los mexicanos, desde luego los más pobres, tengan posibilidad de curarse y atenderse en todos lados. No importa la situación económica de los mexicanos”.
Vamos a seguir aplicando este plan con el apoyo de los ciudadanos, insistió. “Consideramos que nos va a alcanzar el presupuesto”, con la ampliación de 40 mil millones de pesos.
Destacó que la mayoría de los gobernadores “están apoyando para que se implemente este programa».
Hugo López-Gatell, detalló que están en proceso de adhesión 11 entidades: Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Coahuila, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, Morelos, Tamaulipas y Aguascalientes.
Por otro lado, Juan Ferrer, director del Insabi, subrayó la disposición del Ejecutivo federal para, a través de la Secretaría de Salud, firmar los acuerdos de coordinación con los estados, lo cual concluye el próximo lunes. Recordó que las entidades que no se adhieran seguirán manejando los servicios y el gobierno federal les seguirá entregando los recursos que les corresponden.
