La Organización Mundial de la Salud (OMS) y su división en África, informaron hoy que el continente ya cuenta con más de 18 mil contagios y 900 muertes.
Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) alertó la víspera que la cifra de muertos en el continente africano puede oscilar entre 300 mil y 3 millones 300 mil.
Según la OMS el país con el mayor número de contagios sigue siendo Sudáfrica con 2 mil 605 y 48 muertos, sin embargo, el país con la mayor cantidad de muertos es Argelia, donde hay 2 mil 268 enfermos pero 348 decesos. El país con menos contagios es Sudán del Sur con 4 y ninguna muerte.
En otros países como la República Democrática del Congo, se presentan 117 contagios y 5 muertes. No obstante, en este país enfrenta otra dificultad sanitaria que ya alertó a las autoridades en la semana: el rebrote de ébola que se registró el 10 de abril y que dejó 2 muertos de los 3 contagiados.
El informe que publicó el jueves 16 de abril, el Fondo Monetario internacional (FMI), señaló que según sus estimaciones es posible que entre 300 mil y más de 3 millones de africanos pierdan la vida durante esta emergencia sanitaria por COVID-19.
En su informe señalaron que 56 por ciento de la población que vive en ciudades, se encuentra en condiciones de hacinamiento, además de que sólo 34 por ciento tiene acceso a instalaciones que le permitan seguir las recomendaciones de limpieza que han hecho las autoridades sanitarias.
Además, 71% de los trabajadores son informales, por lo que no pueden trabajar desde casa. La situación de los niños también es grave: 40% de los menores de 5 años, están desnutridos.
Por otro lado, además de luchar contra el COVID-19, el continente africano tiene los mayores índices de otras afecciones que convierten a buena parte de la población en grupos vulnerables: África tiene los mayores índices de tuberculosis y VIH/SIDA.
En contraposición, tiene los sistemas de salud más debilitados del mundo y la menor proporción de camas de hospital y profesionales de la salud respecto de la población, además de una gran dependencia de medicinas y farmacéuticos importados.
En términos económicos la situación también puede ser devastadora según el FMI, pues la economía continental se puede llegar a contraer hasta 2.6 por ciento, lo que arrojaría a la pobreza extrema a cerca de 27 millones de personas.
El Fondo alerta que, incluso si se detuviera el virus de inmediato, la economía ya sufre un golpe devastador: el precio del petróleo, que representa 40 por ciento de las exportaciones africanas, se ha reducido a la mitad.
Asimismo, el turismo, que en algunos países representa 38 por ciento del Producto Interno Bruto, se ha detenido definitivamente, y hay empresas que puede que nunca se recuperen del golpe económico.
Según el organismo, se requieren al menos, 100 mil millones de dólares para atender la cuestión de la salud y la seguridad social, y la misma cifra para la emergencia económica. Además proponen parar la deuda y provisión de liquidez adicional para el sector privado.