El objetivo de acabar con las grasas trans industriales está lejos de alcanzarse y 5,000 millones de consumidores en todo el mundo siguen expuestos a estas sustancias tóxicas, advirtió la OMS, que destacó un plan de México para eliminar de la alimentación estos químicos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) se fijó como objetivo en 2018 eliminar estos ácidos grasos trans de la alimentación mundial para 2023.
En un informe la organización reconoció sin embargo que este objetivo es «inalcanzable» actualmente.
«No tienen ningún beneficio conocido, presentan muchos riesgos para la salud y generan costos gigantescos para los sistemas de salud», afirmó el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en un comunicado.
El jefe de la OMS lanzó un llamado a deshacerse «de una vez» de estos «productos químicos tóxicos que matan».
Actualmente, solamente un 43% de la población mundial se beneficia de una forma de protección contra estos productos, que la OMS estima que son la causa de enfermedades cardiovasculares que provocan cada año 500,000 muertes.