La Fórmula 1 ha condenado la actuación de ciertos aficionados en el circuito de Spielberg insultando a otros presentes en el circuito. También Lewis Hamilton fue objeto de insultos y abucheos tras la clasificación del viernes. “Hemos sido informados de que algunos aficionados han sido objeto de comentarios completamente inaceptables por parte de otros en el Gran Premio de Austria. Nos tomamos estos asuntos muy en serio, lo hemos hablado con el promotor y la seguridad del evento, y hablaremos con quienes informaron de los incidentes. Este tipo de comportamiento es inaceptable y no será tolerado”, señaló la F1 en un comunicado. La joven dirección de la Fórmula 1 siempre ha tenido muy presente su lema ‘We Race As One’ en su lucha por la inclusión social.
El heptacampeón británico luchaba por una posición en el top-5 de la parrilla. Sin embargo, perdió el control de su Mercedes en la curva nº 7, bloqueó sus neumáticos y acabó impactando contra las protecciones. El británico perdió su vuelta rápida y se quedó fuera del resto de la clasificación. La grada ‘Orange’ que viajó al Red Bull Ring para apoyar a Max empezó a abuchear y a vitorear el accidente de Hamilton. El de Mercedes respondió a lo sucedido tras el accidente. “Nunca debes alegrarte por la lesión o el choque de alguien. No debería haber ocurrido en Silverstone, aunque obviamente no fue un accidente, y no debería haber ocurrido aquí”, señaló Lewis.
Acosadas en el circuito
Durante el fin de semana en Red Bull Ring, varios aficionados presentes en el circuito denunciaron en redes sociales que habían sufrido insultos homófobos y racistas en las gradas o en los alrededores del recinto. Incluso ciertas aficionadas denunciaron en las plataformas sociales haber sufrido acoso por parte de los seguidores del neerlandés. “Una cosa sobre los fans de Max: nunca me he sentido tan insegura. Estaba andando frente a una tribuna y me han silbado y gritado hasta que la he pasado de largo. Es como si nunca hubieran visto a una mujer”, indicaba una seguidora en Twitter.
Otra aficionada, en esta ocasión fan de Hamilton, contaba su situación en la misma red social: “Como un fan de Hamilton en medio de la oleada naranja, ayer un grupo de cinco aficionados neerlandeses de Max me levantaron el vestido y cuando les confronté me dijeron que ningún fan de Hamilton merecía ser respetado”. Y actualizaba su experiencia tras el domingo de carreras: “Hoy no ha ido mucho mejor, pero al menos sólo me toman fotos o se ríen de mi chaqueta. Nunca volveré al GP de Austria”.
Equipos como Ferrari ya han condenado el comportamiento de los aficionados: “No hay cabida para el maltrato ni verbal ni físico contra ningún grupo de personas en el deporte. Por lo tanto, estamos de acuerdo con Fórmula 1 al afirmar que este comportamiento es completamente inaceptable”. Se espera que los mandatarios refuercen sus mensajes contra el racismo y otras prácticas discriminatorias en los siguientes grandes premios. El promotor y la seguridad del evento podrían sancionar a los creadores de estos actos si son descubiertos.