By A pesar del voto en contra de la oposición, Morena y sus aliados aprobaron que los partidos políticos renuncien parcialmente a su financiamiento público o, en su caso, lo puedan reintegrar directamente a la Tesorería de la Federación para atender “preferentemente” catástrofes provocadas por desastres o fenómenos como sismos y pandemias.
Al respecto, senadores de oposición, pidieron que en el dictamen se estipulara claramente que los recursos que los partidos quieran regresar a la Tesorería sean destinados a la atención de desastres naturales, y no “preferentemente”, porque entonces, la Federación podría usarlos, incluso, en gasto corriente.
El senador de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, consideró que esta reforma es un agravio legislativo; “porque lo que se quiere con esta reforma es lavar la cara con la mentira de regresar la mitad de las prerrogativas y participaciones de Morena con motivo del sismo de 2017 que anunció que en ese momento era el Presidente de Morena y hoy es Presidente de la República (…) pretende tapar el fraude cometido por el fideicomiso en su aplicación y que fue ampliamente soportado por el Instituto Nacional Electoral porque no cumplió con sus objetivos”, declaró.
La senadora del PRI, Claudia Ruiz Massieu, pidió no confundir a la población, porque actualmente ya se permite a los partidos políticos renunciar a parte o la totalidad de sus prerrogativas.
“No nos confundamos, hoy sí se puede solicitar que los recursos que son asignados a los partidos políticos y que se entregan mes con mes, no se le entreguen a un partido y se enteren a la Tesorería de la Federación por conducto del INE. No puede ser directamente el partido con la Tesorería, ni puede el partido decir: ahora no los voy a usar para los fines que dice la Constitución, sino para otro fin, por más loable que sea ese fin”.
Explicó que si los partidos pudieran decidir en qué se gaste el dinero que regresana la Tesorería, seguramente la oposición hubiera dado el dinero “para que se gastara en vacunas, en medicinas para niños con cáncer, como no se ha querido hacer; pero no se puede con el régimen constitucional y legal que tenemos, entonces no confundamos el debate”, pidió.
Antonio García Conejo, del PRD, acusó que lo que pareciera ser algo muy bondadoso, en realidad es una simulación.
“No nos van a dar atole con el dedo, el partido en el gobierno tiene todas las posibilidades de hacerse llegar de recursos, en pocas palabras, va a ser una verdadera simulación. Pero, además va a ser una reforma que va a permitir un manejo discrecional de los recursos. (…) El partido en el poder puede ser muy generoso, donando todos sus recursos para una causa muy necesaria y muy sensible. Pero, en realidad, dejaría en desventaja a los otros partidos políticos”.
A pesar de que su grupo parlamentario votó en contra del dictamen, el senador del PAN y ex presidente nacional de ese partido, Damián Zepeda, argumentó su voto a favor al exponer lo que sucedió en 2017.
“Pues que el sismo fue en 2017 y que el apoyo lo dimos en 2018, estábamos a mediados del 2018 y todavía no terminábamos de dar el apoyo, ¡por Dios!, pues no hace sentido eso, que tengas que apegarte a eso, lo quiero regresar, sí regrésalo, fácil ágil, expedito, por qué le pones trabas, ya tomaste la decisión, nadie te va a obligar, eh, no quieres, quédate con él, lo quieres regresar, regrésalo fácil, punto”.
La coordinadora del Grupo Plural, Nancy de la Sierra, recordó que los únicos partidos que cumplieron su palabra y regresaron sus remesas y remanentes para la atención de las víctimas de los sismos de 2017 fueron el PRI, MC, PAN, Verde y PES, mientras que Morena sólo quedó en buenas intenciones.
Y expresó su preocupación ante “la vaguedad, del lenguaje en el artículo 19 Ter de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que establece que los remanentes de los recursos de los partidos políticos podrán, podrán, cómo que podrán, podrán ser destinados por la Secretaría de Hacienda preferentemente (…) para atender los desastres previstos en la Ley General de Protección Civil”.
No obstante los argumentos, Morena y aliados rechazaron todas las reservas y el decreto fue enviado al Ejecutivo Federal para su promulgación en el Diario Oficial de la Federación.
En el dictamen se establece que los partidos políticos podrán renunciar parcialmente y, en su caso, reintegrar en cualquier tiempo su financiamiento para actividades ordinarias, siempre que no se vea afectado el cumplimiento de estas y prevalezcan en su financiamiento los recursos públicos sobre los de origen privado.
Los recursos deberán reintegrarse a la Tesorería de la Federación por acuerdo del Consejo General del Instituto Nacional Electoral cuando no hayan sido todavía entregados a los partidos políticos.
En el caso de recursos ya entregados a los partidos políticos o de remanente del ejercicio por concepto de financiamiento para actividades ordinarias permanentes, el Comité Ejecutivo Nacional o instancia equivalente que ostente la representación legal del partido tramitará su reintegro ante la Tesorería de la Federación e informará al Consejo General del INE la decisión correspondiente.
