By CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Los jefes del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Grupo del Banco Mundial (BM), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Mundial del Comercio (OMC), se reunieron con los directores ejecutivos de las principales empresas de fabricación de vacunas, con el fin de discutir estrategias para mejorar el acceso a las vacunas covid-19, especialmente en países de ingresos bajos y medianos y en África.
El grupo de trabajo expresó su preocupación de que, sin medidas urgentes, es poco probable que el mundo logre la meta para fines de 2021 de vacunar al menos al 40% de la población en todos los países, un hito fundamental para poner fin a la pandemia y para la recuperación económica mundial.
Los miembros del grupo señalaron que, a pesar de la producción global total adecuada de vacunas en su conjunto, las dosis no llegan a los países de ingresos bajos y medianos bajos en cantidades suficientes, lo que genera una crisis de inequidad en las vacunas.
Por ello alentó a los países que han contratado grandes cantidades de dosis de vacunas y a los fabricantes de vacunas a unirse de buena fe para acelerar urgentemente el suministro de la vacuna covid-19 a COVAX y AVAT, dos mecanismos multilaterales que son cruciales para la distribución equitativa de las vacunas.
Los miembros del grupo de trabajo agradecieron la voluntad de los directores ejecutivos de trabajar colectivamente con ellos para poner fin a la inequidad en las vacunas y su disposición para formar un grupo de trabajo técnico con ellos para intercambiar y coordinar información sobre la producción y entrega de vacunas.
Además, hizo hincapié en que, si se quiere alcanzar el umbral de cobertura del 40% en todos los países para fines de 2021, los gobiernos y los fabricantes de vacunas deben tomar las siguientes acciones de inmediato:
–Liberar dosis a países de ingresos bajos y medianos bajos, pues los países con altas tasas de vacunación han comprado colectivamente más de 2 mil millones de dosis por encima de lo que se requiere para vacunar completamente a sus poblaciones.
–Transparencia en el suministro de vacunas, para garantizar que las dosis lleguen a los países que más las necesitan, en particular a los países de ingresos bajos y medianos bajos.
–Eliminar las restricciones y prohibiciones a la exportación.
–Simplificación y armonización de la reglamentación.
