En Rusia se popularizó la práctica de que los ciudadanos se comuniquen con su presidente, Vladimir Putin, en un formato de “línea directa” desde 2001. El año pasado se canceló debido a la pandemia, pero el mandatario la retomó ayer. Medios locales resaltaron que la mayoría de las preguntas eran relacionadas a la próxima y esperada ola de coronavirus, las vacunas, la economía, beneficios sociales y aumentos de precios, entre otros temas.
Sin embargo, en un contexto en el que la ciberseguridad es el nuevo reto del mundo (con todo y las acusaciones por parte de Estados Unidos sobre el Kremlin por injerencia electoral) llamó la atención que en plenas llamadas el programa ¡fuera hackeado!
La llamada telefónica, que duró casi cuatro horas, enfrentó problemas de conexión, particularmente durante las llamadas desde regiones remotas.
“Nuestros sistemas digitales se enfrentan ahora a ataques poderosos”, dijo a Putin un presentador de la cadena Rossiya-24, después de que una persona que llamaba desde el suroeste de Siberia experimentara problemas de conexión.
“¿Estás bromeando? ¿En serio?”, Putin bromeó, “resulta que tenemos hackers en Kuzbass”.
El mayor proveedor de telecomunicaciones de Rusia, Rostelecom, confirmó los ataques a las agencias de noticias, diciendo que se estaban tomando medidas para “bloquear estas actividades ilegítimas”.